Día de la Mujer ¿Cómo podemos avanzar en la igualdad de género?

El 8 de marzo se celebra el día internacional de la mujer, más que un día de reconocimiento, lo que se busca es reflexionar sobre las condiciones de desigualdad y discriminación en las cuales viven millones de mujeres alrededor de todo el mundo, con el fin de acelerar el progreso y de avanzar en la construcción de una mayor justicia e igualdad.

Sin lugar a dudas durante el último siglo han mejorado las condiciones en las que las mujeres vivimos y nos desarrollamos, pero no es suficiente. México, por ejemplo, se encuentra ubicado en desarrollo humano en el lugar 56, mientras que en igualdad de género retrocede hasta el lugar 68, debido principalmente a rezagos en la salud reproductiva donde uno de los indicadores es la tasa de fecundidad en adolescentes.

En nuestro país, son injustificables las cifras de violencia doméstica; la falta de estudios serios sobre el acoso y la violencia sexual, así como la poca o nula atención de éstos problemas que frecuentemente quedan impunes ante la justicia. Por otro lado, persisten las condiciones desventajosas para la mujer en el mercado laboral que se acentúan por la falta de ayuda del hombre en las tareas hogareñas y en el cuidado de los niños.

Por si fuera poco, la discriminación y los roles asignados a las mujeres se reproducen sin pudor en la publicidad, novelas, chistes y otras manifestaciones culturales, favoreciendo el machismo y la venta de la figura femenina como un objeto sexual, seductor y siempre dispuesto, mientras que al mismo tiempo se idealiza el papel de la mujer sumisa, recatada, entregada, sensata, ordenada, sacrificada, madre ejemplar y reina del hogar.

Las consecuencias graves de la falta de igualdad de género son individuales y de grupo, individuales cuando se afecta la salud física y mental de las mujeres, y de grupo porque los países tienen un menor avance en su desarrollo económico y social.

Reflexionemos entonces, ¿Cómo podemos avanzar en la igualdad de género?

Dentro de las condiciones de igualdad hay dos circunstancias que empoderan a la mujer, una es el acceso a la educación y la otra es tener recursos económicos. ¿Es la mujer una propiedad de la familia, del padre, de la pareja o de los hijos? O tiene el mismo derecho a heredar y tener propiedades y a contar con el apoyo para elegir una carrera y estudiar.

Debemos defender el derecho que las mujeres tienen de recibir educación, de aspirar a un mejor futuro, de alentar sus sueños y proyectos para realizarse no sólo como madres o compañeras. Fomentar la autoestima, el valor de ser mujer, de que tomen las mejores decisiones respecto a su futuro.

Tengamos una convivencia más cordial, evitemos los insultos, ridiculizar solo por el hecho de ser mujeres o desacreditarla por el comportamiento sexual. No se trata de idealizar a la mujer, tampoco de degradarla. Al igual que los hombres las mujeres tienen diferentes capacidades y aspiraciones, ambiciones, logros, defectos y virtudes. Al igual que los hombres, no existen límites para lo que las mujeres pueden realizar.

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